Así que ante esta falta de recursos económicos con la que cuenta la Administración Pública y las medidas de sanción que se están tomando y se tomaran en contra de las empresas de seguridad privada, la cual tememos que perjudique muy seriamente la funcionalidad de muchas de las compañías y las sanciones que más de una va a tener que enfrentar en la que les podrían suspender los servicios, llevara a que las empresas se verán obligadas a despedir bastantes de sus empleados y el tener que  reubicar a los que puedan, esperando aun así no verse obligados a tener que cerrar sus puertas. 

Los servicios de seguridad privada en Colombia, según lo define el Estatuto de Vigilancia Privada, es la prestación de servicios de manera remunerada los cuales se basan en la protección de los bienes muebles o bien los inmuebles, así como también de personas naturales o jurídicas públicas o privadas. 

Lo que busca en si la seguridad privada, es cubrir una necesidad natural que tiene el ser humano, la cual consiste en buscar las personas de sentirse protegidas, y esto se puede hacer a través de profesionales y de empresas especializadas en lograrlo. 

Los sistemas de seguridad privada y las personas que  prestan este servicio, pueden tener una mayor autoridad y estos pueden generar disuasión ante el asaltante, consiguiendo de esta forma que los casos de hurto disminuyan o desaparezcan, ya que lo que el delincuente busca son objetivos que no tengan la protección adecuada. 

Sabe usted ¿para qué sirven los sistemas tecnológicos en la seguridad privada? 

Los sistemas tecnológicos que se utilizan en la seguridad privada pueden llegar a ser muy efectivos, ya que estos nos permiten tener un monitoreo en el cual se previene hurtos e incidentes como por ejemplo cuando se activa una alarma que se encarga de alertar a los ciudadanos y a las autoridades, y en caso de que se lleguen a presentar actos que puedan poner en riesgo la tranquilidad y comodidad de la comunidad, los sistemas la mayoría de las veces son de gran ayuda para así lograr un accionar eficaz gracias a los registros. Permitiendo de esta forma que exista un trabajo que funcione en conjunto con las autoridades, quienes son informadas inmediatamente. 

Lo que es el control de acceso, los lectores de biométrica, los lectores de placas y de tarjeta, el servicio CCTV, incluso el rastreo satelital a las personas y los vehículos, las puertas de seguridad, talanqueras, los sensores, el control satelital del combustible, los radios y las barreras perimetrales, las cuales permiten que se tenga un mayor control sobre lo que está sucediendo al interior del lugar el cual cuenta con un servicio de seguridad privada. 

El sistema de vigilancia en video, por ejemplo, puede llegar a ser un elemento de gran ayuda en los servicios de seguridad privada, ya que este hace que las capacidades humanas y el componente tecnológico funcionen mano a mano, logrando de esta forma un mejor resultado en las labores del vigilante privado. 

La presencia del CCTV, pueden generar un efecto disuasivo, ya que las personas que van a delinquir, por razones obvias, no van a querer ser grabados ni atrapados, así que una vez que se dan cuenta de la presencia de estos dispositivos, lo más seguro es que prefieran buscar otro sitio para realizar su acto delictivo. 

¿Qué variables deben cumplir las empresas que prestan los servicios de seguridad privada en Colombia para poder ejercer un servicio de vigilancia que se destaque por su calidad? 

Es de vital importancia que las empresas de seguridad privada cuenten con sistemas tecnológicos para que estos les permitan a los guardas y a los administrativos gestionar así las tareas de seguridad privada de forma oportuna, favoreciendo de esta forma a las personas y a los clientes. 

La capacitación, sin duda alguna es el punto más importante, ya que de la clase de capacitación que reciban los guardas de esto dependerá en gran parte la calidad de la prestación del servicio de seguridad privada que estos impartan. 

Portar el uniforme de la manera más adecuada posible, dar a su vez un buen trato a las personas y bien tener conocimientos básicos los cuales les puedan permitir tomar una buena decisión esto en caso de que se presente algún imprevisto, estos son puntos clave, los cuales permitirán que la tranquilidad de sus clientes quienes contratan este tipo de servicios, sea lo primordial. 

Desde esta semana se inicia la reapertura de dos de los sectores de producción en Colombia como lo son la construcción y las manufacturas, ante esto las Empresas Colombianas de servicios de Seguridad Privada, han tomado la decisión del Gobierno Nacional en sobre establecer y poder colaborar con el aislamiento colaborativo e inteligente de las personas. 

Según indico la señora Ximena Morales, quien es directora ejecutiva de Ecos, es de suma importancia poder señalar que la precaución y la mitigación del COVID – 19, es un trabajo que se debe realizar en conjunto, y que este se debe desarrollar de forma articulada entre lo que son las autoridades, y las personas encargadas de brindar los servicios de vigilancia y seguridad privada, así como también los usuarios de estos. 

Nuestro verdadero compromiso como sector es el apoyar a nuestros clientes y los puntos de custodia para que así se tenga un adecuado desarrollo con las actividades esto de acuerdo a los nuevos lineamientos de bioseguridad otorgados, por lo que siempre estaremos abiertos a ayudar, a su vez, es de suma importancia que todos los colombianos tengamos presente que el hecho de retomar las actividades significaría que debemos ser aún mucho más estrictos esto en los protocolos de bioseguridad para de esta forma proteger la salud de todos los trabajadores, así como también la de sus familias y las de los colombianos. 

Cabe destacar que se han liderado múltiples acciones las cuales están orientadas al acompañamiento de los empresarios de cada sector en distintas jornadas pedagógicas sobre los parámetros que debemos seguir, unas de las medidas que debemos adoptar de frente a los cambios en todos sus procesos que nos permitan garantizar de esta forma el aislamiento el cual está siendo organizado en el interior de las compañías y de sus puntos de custodia esto con relación a la prevención, la protección y la bioseguridad, además del fortalecimiento que debemos tener en el cuidado que debemos tener para el regreso a los hogares. 

Finalmente, cabe mencionar que es de suma importancia señalar que tanto la precaución como la mitigación del COVID19, es un trabajo que se debe hacer en conjunto el cual se debe desarrollar de forma articulada entre lo que son las autoridades, los servicios de vigilancia y seguridad privada y las personas que utilizan estos servicios. 

Después de la reciente polémica que ocurrió el miércoles por el decreto que otorgo el Gobierno Nacional para poder enfrentar la creciente emergencia sanitaria que estamos viviendo con el coronavirus, en este decreto en el que se estableció los toques de queda en las regiones estas deberán tener la aprobación de la Presidencia, este pasado jueves, la Casa de Nariño emitió un nuevo decreto en el cual se están impartiendo las instrucciones necesarias para así poder expedir normas en relación al orden público esto en virtud de la emergencia sanitaria por la que estamos pasando. 

Este es el decreto 420, el cual fue firmado por todos los ministros, en el que se ha señalado que las medidas del orden público referidas por los alcaldes y los gobernadores en las que piden restringir el derecho de circulación, así como lo son los toques de queda o los simulacros, también aclaran que bajo ningún caso se podrán impedir lo que es el servicio público de transporte terrestre (intermunicipal), los de carga y los de modalidad especial, cada vez que estas modalidades son autorizadas por las autoridades que se encargan del orden nacional y que corresponden a la prestación de un servicio público que es esencial para todos nosotros. 
 
Tampoco se podrán suspender las actividades previstas en los establecimientos y los locales 
comerciales de los minoristas de alimentación, bebidas, productos y bienes considerados de 
primera necesidad, productos farmacéuticos, productos médicos, las ópticas, 
productos ortopédicos, productos de aseo e higiene, alimentos y medicinas 
para las mascotas. 
 
Uno de los puntos que podemos aclarar es que no se podrá impedir la oferta creciente de los restaurantes y de los locales comerciales utilizados por medio de las plataformas de comercio electrónico o bien por entregas a domicilios, ni tampoco a los restaurantes que se encuentran ubicados dentro de las instalaciones hoteleras, los cuales únicamente podrán prestar el servicio a sus huéspedes. 
 
Otra de las operaciones es que los alcaldes y los gobernadores no podrán restringir son el funcionamiento y la operación de los centros de llamadas, los centros de contactos, los centros que prestan soporte técnico que se encargan de prestar servicios en el territorio nacional y las plataformas de comercio electrónico. 
 
Además de esto, no se podrán suspender los servicios de prestación de vigilancia y seguridad privada ni tampoco los servicios técnicos y de soporte de los servicios públicos 
esenciales y de telecomunicaciones. 

De esta forma les pedimos encarecidamente a los vigilantes privados mantener siempre la calma ante esta situación, guardar como mínimo un metro de distancia entre las personas a las que se les están prestando los servicios, también entre los compañeros, recordar la forma correcta de toser y estornudar, evitar el contacto con otras personas y el lavado correcto de manos ya que los oficiales de seguridad privada que salen a cumplir con sus labores quedan expuestos no podemos permitir que se vean afectados también. 

Simultáneamente a los servicios de seguridad que prestan las naciones a los ciudadanos, en lo que es el mercado global, a partir de este fin nació la vigilancia y la seguridad privada que actualmente predomina en toda Norteamérica esto con un 39% de participación, la cual se encuentra seguida de Asia, el Pacífico, el Medio Oriente y África con un 15% y lo que es  América Latina y la Europa Oriental con un 6% de empresas que se encargan de ofrecer los servicios de guardias de seguridad privada, así como también de supervisores, de escoltas, de operadores de los medios tecnológicos y de los manejadores caninos. 

Para ciertos investigadores, estos tipos de servicios aparecieron en Colombia por ahí de la segunda mitad del siglo XX, y llego por la necesidad de defenderse ante los ataques padecidos a las personas o bien a sus propiedades, y después por la iniciativa del personal militar el cual había sido retirado informalmente, ante esta situación se creó este tipo de servicio, el cual comenzó a ser regulado en 1966, recién perturbado el orden público, con el Decreto de 1667, en el cual se dictó el conocido Estatuto Orgánico de la Policía Nacional; más sin embargo fue en 1993 cuando se dio el decreto 2137, el cual dio vía libre a que se pudieran constituir las empresas particulares de servicios de seguridad privada nacionales para así poder prestar el servicio de manera remunerada de la protección de bienes muebles o inmuebles, también del transporte de valores, los escoltas y las actividades relacionadas, esto con previa autorización del Ministerio de Defensa el cual es el encargado de expedir las licencias de funcionamiento, y las cuales se encuentran siempre bajo el control directo de la Policía Nacional, el cuerpo armado al que se le facultó transitoriamente el permiso de otorgar las licencias para poder prestar estos servicios por parte de las Juntas de la Acción Comunal, los Comités Cívicos, las Juntas Prodefensa y las Unidades Residenciales, en lugares públicos o abiertos al público, los cuales se hacen bajo su supervisión y su control. 

En el año de 1994 por medio del decreto de la ley 356 se dictó el Estatuto de Vigilancia y de seguridad privada y se crea de esta manera la Superintendencia de Vigilancia y Seguridad Privada, la cual está encargada hasta ahora de controlar y vigilar a las empresas que se encargan de prestar estos servicios. Este es un sector que podría llegar a ser uno de los más lucrativos para lo que es la economía mundial y lo que nos concierne a muchos la colombiana, cabe mencionar que nuestro país ha sido creciente en sus ingresos operacionales, los cuales han pasado de $3.1 billones en el 2007, a $7.5 billones en el 2014,esto nos indica que ha tenido un crecimiento del 141.9% en solamente 7 años si vemos que entre 2010 y 2014 duplico sus ingresos, según la Superintendencia de Vigilancia.  

En el año 2017 lo que es el sector de la vigilancia privada logro reportar 9.29 billones solo en ventas, cerca del 1% del PIB de Colombia generado únicamente en ese año, el cual fue generado por aproximadamente unas 800 compañías, de las cuales la mayoría son de vigilancia y en una menor proporción son las empresas de capacitación, las empresas de cooperativas, las compañías que se encargan de blindajes, las asesoras, las que se encargan de arrendar, los que prestan los servicios de seguridad en prisiones, las empresas administradoras de peajes y 8 que son las empresas que se encargan de transportar valores; todas estas en total forman un conjunto en el que albergan cerca de unos 3000000 hombres y mujeres, los cuales se encuentran regulados en su actividad por la ley 1920 que empezó a regir a partir del 2018, y la cual se encuentra en proceso de reglamentación, en  particular los artículos 5 y 8 los cuales se refieren respectivamente a lo que es el seguro de vida colectivo y a las condiciones técnicas que las Instituciones Prestadoras de Salud IPS deben cumplir para lo que es la práctica del examen médico psicofísico para la tenencia y portación de armas. 
 

Si bien es cierto sabemos que la vigilancia privada está calificada en la mayoría de países como una actividad peligrosa o de alto riesgo, en Colombia no ha sido enmarcada así, más bien por el contrario su personal han sido catalogados como ciudadanos de tercera, en los cuales predominan un modelo de trato autoritario y despótico, el cual es característico de los cuarteles, como si estos trabajadores estuvieran condenados sólo a recibir órdenes y estos no fueran ciudadanos los cuales están sujetos a derechos, como lo indicó así la Agencia de Información Laboral de la Escuela Nacional Sindical.  

A finales de lo que fue la legislatura del año pasado, en la secretaría general del Senado de la República se logró lanzar el proyecto de ley 186 del año 2019 el cual buscaba el reconocimiento de los derechos de estos trabajadores y propone crear así la Defensoría de los trabajadores de lo que es el sector de vigilancia y de seguridad privada. 
 

A este sector lo opacan distintas circunstancias como por ejemplo las que tercerizan a sus actividades; además de la ausencia de la normalización en lo que son las tarifas; la alianza en los procesos de contratación estatal esto con diferentes entidades públicas, para así poder actuar por esquemas de colaboración esto a través de constantes uniones temporales; la ausencia de las capacitaciones a sus empleados, a los que al parecer no les reconocen sus derechos laborales; esto con la falta de diálogo social, lo que nos da como resultado que apenas en el 3.37% de estas empresas en el año 2015 solo se habían firmado unas 12 convenciones colectivas y unos 13 pactos colectivos, y las múltiples entidades ilegales que no se encargan de tomar las pólizas legales, como lo son las de responsabilidad civil extracontractual, que puedan cubrir los riesgos del uso indebido de las armas de fuego o algunos otros elementos. De hecho, se cree que el 30% de las empresas de seguridad privada que se encuentran laborando en Colombia lo están haciendo de forma ilegal y que estas están ofreciendo tarifas que son muy inferiores a las empresas que están trabajando de forma legal. 
 

Con el propósito de poder dinamizar el sector, desde el año pasado se han estado promulgando normas que puedan reglamentar las tarifas en las academias y escuelas encargadas de la capacitación, ampliando las licencias y las renovaciones por el termino de 10 años a las empresas de seguridad en cualquiera de sus modalidades, las empresas de transporte de valores y a la credencial a asesores, a los consultores o los investigadores, y de unos cinco años a los departamentos de seguridad privada, a los servicios especiales y a los servicios comunitarios. Un debate que continua en el orden del día es sobre el presunto aumento en el mercado de las empresas de vigilancia y de seguridad privada que vienen del extranjero, que de acuerdo a lo que es la legislación nacional solamente se permite su funcionamiento a aquellas que fueron constituidas antes del año 1994. 

Recientemente en el sector de seguridad privada formará parte del Congreso de la República con la llegada de un representante quien tendrá el deber de presentar un proyecto de Ley incluido en el estudio para de este modo actualizar el Estatuto de los servicios de Seguridad Privada de acuerdo al decreto 356. 

Es el principal objetivo de la ya antes mencionada reglamentación, que en verdad el país pueda encontrar en los servicios de seguridad privada un apoyo para así poder brindar la seguridad ciudadana. Y que esto ayude a que haya una mayor tutela por parte del Estado para que estos servicios de Seguridad privada se puedan desarrollar. 

Pero no solo depende del Estado, se pide que las compañías de seguridad privada además se afinen los controles esto con el fin de prosperar por la existencia real de las empresas de seguridad privada y no de compañías de mentiras. 

Se estima que en la práctica mundial el esquema de los servicios de seguridad ciudadana se basan principalmente en que los particulares deben de asumir su propia responsabilidad. 

Ya que ese es el principal concepto que se debe aplicar hoy en día, y a su vez esperamos que la comunidad entienda que en la seguridad privada van a encontrar una eficiente y excelente alternativa del servicio con una gran calidad, ante un Estado, que ante la falta de recursos no ha podido garantizar completamente la seguridad para cada ciudadano. 

Cada vez son más los viajeros extranjeros se dejan enamorar por el encanto de nuestros paisajes y de las ciudades de Colombia. Previamente nuestro país era considerado uno de los destinos más peligrosos para los visitantes extranjeros. Ahora, debido a años de trabajo y contar con la firma del acuerdo con las FARC, podemos estar agradecidos, la superación de este problema de narcotraficantes el cual ocasionó múltiples atentados a principios de la década de 1990 y la fuerte apuesta que teníamos por el desarrollo del sector turístico. Las condiciones de seguridad en Colombia han venido cambiando. 

Según cifras las otorgadas por parte del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, Colombia recibió cerca de un 7,8% más turistas en el 2019 esto en comparación con el año anterior. En total se recibieron más de 4.5 millones de turistas, lo que nos da una cifra récord para el sector que deja en claro cómo el mundo a mucho costo ha recuperado la confianza que tenían antes en el país como un destino turístico de talla internacional. 

Desde que se dio la firma del acuerdo con las FARC, Colombia dejó de ser un país problemático a ser un país de solución, según aseguró Precolombia. Obteniendo como resultado del proceso de paz, en la actualidad existen unas mejores condiciones de seguridad y también una mejor reputación a nivel internacional. Previamente únicamente veíamos noticias negativas de Colombia y, al día de hoy, podemos ver noticias positivas. 

Entre las cifras que se encargan de respalda este cambio positivo que tuvimos en la percepción del país podemos destacar la reducción en la tasa de homicidios la cual el año 2017 llegó a ser de 27 por cada 100 mil habitantes, la cual fue la más baja en 30 años y la cual disminuyo en un 96% en el número de asesinatos causados en conflicto armado. 

Gracias a las mejoras que hemos tenido en la seguridad privada, los turistas de todo el mundo se han puesto nuevamente en Colombia. Los países que nos traen mayormente a los viajeros son Alemania, Estados Unidos, Costa Rica, España, Brasil, Ecuador y Argentina, por mencionar solamente algunos.  

Los principales destinos que buscan son Cartagena, Bogotá, San Andrés, Medellín y Cali, pero también hemos empezado a consolidar la oferta del turismo cultural en varias zonas como lo son Amazonas y la Sierra Nevada de Santa Marta. 

Podíamos decir previamente que la presencia de grupos armados, los narcotraficantes y la poca atención que teníamos por parte del Estado eran puntos que agudizaban la inseguridad rural. Lo que eran las economías ilícitas, como por ejemplo la minería ilegal y la deforestación que teníamos, además, de los reportes que eran prácticamente diarios de asesinatos a los líderes sociales, eran los que más que nada afectaban la producción de la tierra, la inversión y la confianza que teníamos los colombianos para emprender. 
Con este nuevo panorama fue que se abordaron las temáticas de seguridad y desarrollo en la ruralidad con el fin de seguir siendo un punto turístico y que cada persona que nos visita se sienta tan seguro como cuando está en su país. 
Si bien podemos decir existen dos tipos de Colombias rurales. En la primera podemos encontrar la fuerza pública la cual puede entrar y cuenta con desarrollo. En la segunda podemos encontrar las zonas que tienen un difícil acceso. Para estas otras regiones necesitamos una visión integral en donde la fuerza pública y las comunidades deberán trabajar juntas, no sin antes establecer unos lazos de confianza para que estos puedan lograr la construcción de un futuro para la comunidad. 
Si bien sabemos que una cosa es la ciudad y otra el campo. En este último ha sido históricamente discriminado esto por el conflicto. La guerra ha dejado una relación que ha sido directa entre la fuerza pública y los grupos armados. Además de la policía, necesitamos de una presencia integral del Estado. Para esto es necesario que construyamos confianza entre todos los beneficiados. 

 Uno de los temas de discusión ha sido el asesinato de los líderes sociales, los cuales desean que paren y de ser posible adelantar estrategias que nos permitan su protección en todo el territorio. Aunque si bien sabemos para proteger a los líderes se deben centrar en la protección individual. Pero sabemos que no son las más apropiadas. Ya que estas se tratan de camionetas que por el contrario podrían poner más en riesgo a las personas, se debe avanzar más en las medidas de protección a nivel de la comunidad. 
En base a lo anterior, según informo el coronel Gómez asegura que la protección individual puede llegar a ser muy complicada, a su vez hizo un llamado a la prevención. Diciendo que lo que se necesita para poder estar más cerca a las comunidades es haciendo un tejido social y así borrar esa imagen de una fuerza pública represiva y que estos nos vean como amigos, como alguien a quien puedas contarles lo que está pasando. 
Entre todo esto, debemos decir con mucha tristeza que nuestro país está teniendo un retroceso el cual nos lleva a escenarios de guerra de la antigua Colombia.  
Como funciona la interacción el entre desarrollo y la seguridad 

 Ante las preguntas que existen sobre qué es primero en el campo: entre el desarrollo o la seguridad, podemos decir que para no ser parte del crimen debemos pasar a la legalidad con proyectos que sean productivos y educación, para lo que sea que se necesita, como la voluntad política y el dinero. 
También queremos recalcar la importancia de poder darles salida a los problemas que son los que nos unen. Debemos retomar los diálogos con las comunidades para que podamos entenderlas, y esto es algo que la directiva de la Policía Nacional ha buscado el poder generar ese diálogo. 
Uno de los principales objetivos de la Policía de Carabineros es el poder priorizar las zonas en donde los delitos como lo son el homicidio, el secuestro, la extorsión, el hurto, entre muchos otros delitos, los cuales tienen mayor un impacto para mantener así la convivencia y la seguridad ciudadana.  
Finalmente, queremos llegar al final este articulo con la conclusión de que para poder ejecutar una política de seguridad que sea efectiva en el campo colombiano debemos restaurar la confianza que se ha perdido entre la comunidad y la fuerza pública. De este modo, el desarrollo va a llegar a las regiones y así dará frutos que puedan mejorar la vida de los campesinos.